Este Compendio de castellano, arreglado por don Fidel Leal Cruz es, en realidad, una estupenda guía para aprender bien y sin enredos el español: sobre todo la gramática -enseñada con sencillez-, tan indispensable para proponer, argumentar y desarrollar ideas, para construir un pensamiento definitivo y coherente, para precisar y entender el discurso. Este “tratado”, que así lo podemos llamar, tiene además una condición definitiva y reveladora del sentido pedagógico que le quiso imponer el autor: buscar una relación indiscutible del estudiante con las nociones gramaticales, pues son muchos los ejemplos que se exponen en el texto, que relacional al tiempo los temas ortográficos con los sintácticos, los semánticos y los literarios, como lo indica la pragmática. No es una simple –e impenetrable- teorización o conceptualización, sino que se va descubriendo el engranaje de la gramática en especial de la sintaxis, con la producción del pensamiento y su relación con el lenguaje escrito y hablado.